Sunday, March 14, 2010

Nomás por fun

Ya todos saben que viene Jonathan.

Lo me sorprende es que es un tema de conversación, expectativas y fantasias. Gente que quiere verlo en Uruguay, en Córdoba. Gente que modificará compromisos que parecían inmodificables para verlo.

Sorprende porque está todo sostenido de una empatía por algun tiempo ido. Hace rato que Jonathan no hace una canción fresca (su estilo) pero aquellas viejas son tan buenas, están tan entramadas en nuestras biografías, que su visita es un motivo de alegría, de hipersensibilidad gozosa.

Por más que el carozo más amargo me diga "va a haber un montón de boludos creyendo que Jonathan es amigo de ellos, haciendo cualquier cosa para llamar la atención, gritando chistes sin gracia, queriendo hacer palmas en momentos inoportunos - si es que hay algun momento opotuno para eso- y esas pelotudeces", la pulpa mas dulce dice "qué bueno tener ganas de ver a alguien que viene a tocar! "

Encima parece que toca El Joven se Estremece.


Wednesday, March 03, 2010

El posteo de aquí abajo, puede parecer una queja. No lo es. O sí, pero revestida de algo un poco más simpático. La queja, sin embargo, parece el modo de relación de la mayoría de las personas desconocidas con las que uno se cruza. Lo que antes era "el tiempo", ahora es la queja. Peor: una queja del tiempo.

Supongo que es porque a la queja se le supone una función de identidad. "Tremendo el calor" no sabe de alguien que guste de (o le sea indiferentes) las altas temperaturas. De hecho no importa: la forma de formular la queja no es una invitación al diálogo sino una certeza.

Antes ("en mi época") la queja era parte de un modo de elevar ciertas polémicas a un entretenimiento divertido. "Los Beatles me tienen hartos, está sobrevalorados", por ejemplo, deja al terminar las comillas el silencio que espera la reacción. Estimula a la reacción.

Sin embargo el cinismo quejoso que se escucha ahora, rompe el contrato en pedacitos. "Je, como la presidenta que tenemos que....". "Sí, je, el cantante ése de los Bobosónicos, je, que...".

La queja es un recurso también. Ahí está el ejército de histéricas postfreudianas que en vez de desmayarse o anestesiarse, se quejan de todo, todos los días en facebook y logran que alguno de los tremil amigos les deje el comentario ("¿por qué?", "¿que te pasóoooo?", "ánimoooo").

Por último, quizás la queja sea una forma discursiva que sostiene una emoción sin conflictos. Como todos tienen derecho a quejarse, hay, por un lado, cierta obligación de quejarse (esto lo dice de alguna forma Sandino Nuñez, el Zizek uruguayo) y por el otro, como todos se quejan, se pierde toda la eficacia y por ello la disrupción. Puede uno quejarse todo el tiempo y a grandes gritos o acciones que sabemos muy tranquilos que las cosas no cambiarán, y así nos aseguramos eternizar ese estado de conformismo quejoso.

No sé por qué terminé escribiendo esto, ja.
Los trámites en el Ministerio de Salud tienen la lógica de las paradojas de Zenón, esas en donde uno cree que ir de A a B es una boludez pero cae en un infinito a mitad de camino (o algo así)

Saturday, February 27, 2010

Y aquel vestido que nunca estrenaste
lo estrenas hoy

Thursday, February 25, 2010

+++++ Diálogos

- ¿Qué hace el gato?
- Y... ahora que hace más frío, duerme.
- Claaro
++++Diálogos

- A mí me gustaría saber cómo hizo Alfredo Cotto para pasar de una carnisería mniserable al hipermercado.
- Jeje
++ Diálogos

- Tiene esa cosa del cine nacional que te muestra una cosa y te lo dice... ¿para qué me lo aclarás si lo estoy viendo?
- "Ahh, la vieja Olivetti"
+ Diálogos

- Estaba como melancólico y con 4 rivotriles adentro
- Él siempre es así...
- Ya me sé casi todas las canciones nuevas.
Diálogos

- Ese artículo de Simon Reynolds puso en palabras algo que uno intuía pero no podía decirlo tan claramente..
- Al final , entonces, es como un letrista melódico.

Friday, January 08, 2010

Atrapando el tiempo (las encuestas, las casualidades)

En el posteo anterior, puse los libros que más me gustaron en el 2009. En PinkMoon Radio intentamos un programa con lo mejor del 2009, pero por diferentes cuestiones, nos pareció aburrido y terminamos haciendo más un repaso online, que una lista "pensada".

Días mas tarde, caen en mis manos dos revistas: una Rock de Lux con un repaso del 2007 y una Esculpiendo Milagros con "Lo mejor del '95".

Por último, hace unas semanas atrás comentábamos por teléfono con mi hermano sobre lo aburrido que nos parecían las encuestas hoy en día, cuando antes las esperábamos hasta con ansiedad. Surgía a partir de una hecha sobre "músicos" que elegían al artista de la década y ganaba Andrés Calamaro, con 15 de 141 votos (el 10% ). Para que se den una idea del "valor" de la nota, segundo estaba LA Spinetta con 13 votos y tercero Peter Capussotto con 11.

Me extiendo un poquito sobre esto y ya vuelvo. Hay un reportaje a Andrés, que es nombrado como Artista de la Década y que comienza con una pregunta muy punzante: "¿Qué significa haber sido elegido artista de la década por tus pares?". Todo el rollo lleva a una especie de legitimación instantánea, que, por el vértigo social y la decadencia de la crítica de rock, está condenada a ser olvidada en pocas semanas.

Sin embargo, como aún algunas legitimaciones funcionan (ahí tienen a Animal Collective), está bueno ver quiénes fueron los 15 votos que decidieron que Andrés fuera el "artista de la década". Control F "Calamaro" y el resultado es: Lucio De Caro (Nikita Nipone), Fernando Blanco, Ale (Viva Elástico), El Festival de Viajes, Charlie Desidney, Maldito Flanders, Pepe Céspedes, Pablo Coniglio (Shaila), Rifle Pandolfi (Mil Hormigas), Ramiro Cerezo (Pier), Mono (Kapanga), De Bueyes, Pablo Marcheti (Conjunto Falopa), Walas y Juan Zorlak (Anima Triple).

Interesante, ¿verdad?.

Siguiendo por el lado de lo legítimo (y la paradoja de ver caer mitos al tiempo que se erigen, sólo por breves instantes, nuevos o -mucho peor- reinvenciones de los viejos), en aquella RDL hay una nota del director de Muchachada Nui, que me hizo mucha gracia y que escaneo para que la vean. (Pego un video de algo de lo que hace Muchachada Nui, para quienes todavía no los conocen).






Y cerrando el circuito trazado por el azar, dos cosas de la revista de Cambiasso que causan mucha gracia por sí mismas:






Así que, puestos a pensar en qué es lo que hace a las encuestas de fin de año aburridas, creo que es el hecho de que nadie necesita más información. Quise escuchar los 100 mejores temas del año elegidos por Pitchfork y el resultado fue que aguanté hasta el 15 y los únicos que me parecieron interesantes eran de grupos que ya había descubierto por mí mismo (en realidad la azarosa coyuntura de tiempo y espacio libre que determinan la posibilidad de las nuevas escuchas). Lo más divertido fue descubrir una balada de Artic Monkeys, sin embargo me embolé volviendo a escuchar el de XX, sólo para caer otra vez en la certeza de que un millón de moscas pueden estar equivocadas.

Me encuentro con que la música que uno escucha no se puede segmentar en años, porque la verdad es que el 80% de las veces uno está escuchando (o leyendo, o viendo películas) de más de 12 meses atrás y lo "mejor" pasa a ser un encuentro entre un momento artístico atemporal y uno personal hipertemporal, que arman una cuestión especial imposible de transmitir mas allá de un balbuceo singular que nadie a quien uno se dirige capta en su totalidad.